lunes, 8 de diciembre de 2008

MENSAJERO - Laguna

EL DÍA
Meritorio empate del Laguna en su visita al Mensajero

El Mensajero pierde la estela del pelotón de cabeza y se queda a cuatro puntos del cuarto, al ceder su segundo empate consecutivo en su campo, esta vez ante un Laguna al que el punto le sirve para continuar fuera de los puestos de descenso.

Los primeros cuarenta y cinco minutos no sirvieron para sacar ninguna conclusión positiva, sobre todo por parte local, cuyos jugadores estuvieron muy perdidos en el centro del campo, mientras que los laguneros intentaron salir con rapidez y dispusieron de las dos ocasiones más claras de este periodo.

La primera llegó en el minuto 24 cuando Anray se internó por la banda derecha en solitario y se plantó sólo ante Muni, pero el meta adivinó su remate y desvió el balón con el píe, y la segunda cinco minutos después con un lanzamientos de esquina que ejecutó David Figueroa que se marchó ajustado al poste derecho del marco local.

El conjunto de Francisco Javier Vales por contra fue incapaz de reaccionar, y tuvo que esperar al minuto 40 para acercarse con algo de claridad a los dominios de Salillas, eso sí, a balón parado, con un lanzamiento de falta que sacó Suso y que detuvo sin excesivos problemas el portero visitante.

En la reanudación el conjunto palmero no mejoró en absoluto su juego, su técnico Francisco Javier Vales lo intentó con los cambios, pero estos no surtieron efecto en la actitud del equipo, mientras que los de Toño Dorta continuaron con su juego de contención a la espera de salir al contragolpe, pero a pesar de que lo intentaron no llegaron a poner en verdaderos aprietos el marco defendido por Muni.

Así esta segunda parte se desarrolló con pocas oportunidades que reseñar, aunque el conjunto palmero pudo resolver este encuentro complicado en el minuto 85, pero Joel mandó al poste izquierdo.


CANARIAS DEPORTIVA
Los dos equipos hicieron lo justo para el resultado final
Mensajero y Laguna se abonaron al empate sin goles
Mensajero y Laguna empatan a todo en una mañana fría en Santa Cruz de La Palma en un encuentro sin ocasiones y frio como el propio ambiente.

Marto

CD Mensajero:
Muni, Nestor, Padrón, Dani, Tata, Echedey (Miguel min.46), Suso, Fede (Genaro min. 56), Ever, Yeray (Joel min. 73), Mencey.

Incidencias:
Silvestre Carrillo, césped artificial en buenas condiciones. Presenciaron el encuentro más o menos 250 espectadores. Se le hizo el pasillo a los alevines del Mensajero, campeones de copa.

En la primera parte el Laguna tocaba bien en la parcela ancha del terreno de juego, pero sin crear ocasiones ante la meta defendida por Muni. El Mensajero intentaba llegar con rapidez a los dominios de Salillas, pero siempre, la buena disposición táctica del conjunto lagunero evitaban las llegadas de los delanteros mensajerístas.

En el minuto veinticuatro, Anray, probó fortuna pero Muni respondió echando el balón a córner. Tras el lanzamiento, David Figueroa intentó sorprender marcando desde la esquina, pero el balón se marchó a escasos centímetros de la portería del Mensajero.

El Mensajero seguió mostrándose como un equipo falto de ideas, y se echó en falta el criterio del centrocampista Joimar, que aquejado de una molestia, no fue de la partida.
Antes del descanso, la única ocasión a reseñar del Mensajero, la tuvo Suso, cuando lanzó una falta desde la frontal del área que Salillas atrapó en dos tiempos.

En la segunda parte, el partido transcurriría por los mismos derroteros, y seguían ausentes las ocasiones de ambos equipos. El técnico local cambió a Echedey e introdujo en el campo al joven Miguel para intentar tener más la pelota en el centro, pero ni ese ni el resto de los cambios dieron mayor mordiente al Mensajero.

El Laguna, que desapareció completamente en ataque en esta segunda parte, no encontraba la forma de atravesar la defensa mensajerista. En la recta final del choque, Joel, tras una buena jugada del Mensajero, estrelló un balón en la madera de la portería defendida por Salillas. Y esa y los cuatro córners consecutivos en el último minuto serían las únicas ocasiones de la segunda parte.
Al final del encuentro el empate sin goles sería lo más justo ya que ni unos ni otros se mostraron inspirados en una tarde fría y desapacible en la capital palmera.